jueves, 6 de diciembre de 2007


Radio Universidad, una ¿radio universitaria?


La radio es el medio con más alcance para transmitir en toda América Latina, la podemos escuchar tanto en lugares urbanos como en los rurales. “A su difusión masiva se le añade, pues, la ventaja de que, para recibir su mensaje, no es necesario saber leer” (Kaplún,1994, p:23).
En América Latina existe una gran población de analfabetas y de analfabetas funcionales, la gran mayoría de estos se encuentran en lugares rurales, otros están en las periferias de la ciudad donde no tienen acceso ni a la televisión, ni mucho menos al internet o a una computadora, y la radio se vuelve su principal fuente de información, tanto de la comunidad como de la región global. Muchas veces no existen programas que estén comprometidos con la gente, con información oportuna, los programas radiofónicos suelen caer en mero entretenimiento, aunque existen una gran gama de distintos géneros radiofónicos. Los géneros radiofónicos van desde informativos, cuentos, monólogos, charlas, misceláneos, deportivos, los más escuchados; los de entretenimiento y los más olvidados o menos conocidos; lo educativos.
“Los programas educativos o culturales muchas veces los podemos asociar con la Radio Universidad de alguna escuela de educación superior. La radiodifusión universitaria se inició en México en 1937, con Radio UNAM, la cual contaba con un amplio programa de extensión cultural” (Romo, 1990. p:27). Un tiempo después empezaron a trabajar varias universidades en proyectos similares. Para los años setentas la Universidad Autónoma de Baja California nuestra universidad, iniciaba actividades transmitiendo desde la ciudad de Mexicali, con el paso del tiempo empezaron en Ensenada y después en Tijuana. Con el objetivo primordial de trasmitir información, música y conceptos de la universidad y que cada emisora de los distintos municipios produjera y realizara sus propios programas. Hace aproximadamente unos treinta años que la Radio Universidad de la UABC esta al aire en Mexicali y Ensenada, en Tijuana sólo tiene ocho años. Muchas veces las transmisiones dan como resultado una cultura elitista, o programas aburridos como dirían muchos alumnos, hay muy poca participación de estudiantes al menos en la programación de Ensenada, son pocos los programas que se transmiten desde el puerto, la mayoría son de Mexicali. Incontables estudiantes no tienen noción de que existe la Radio Universidad, algunos saben, pero nunca la han escuchado y si la han escuchando les parecen transmisiones aburridas, sin música de su predilección, sin participación de los mismos alumnos.
Es trascendental recalcar este último punto, siendo que la radiodifusora lleva por nombre Radio Universidad no parece una radio de universitarios, no le estamos quitando meritos a la programación que en su mayoría es buena, pero no es llevada por alumnos. Los alumnos caen en la pasividad de las actividades de la escuela, ahí debería entrar la difusión escolar, deberían participar todas las carreras en los programas, que los mismos estudiantes propongan temas distintos y que no tengan que ser pasados por filtros en Mexicali. La radio universidad debería ser la mediadora entre la comunidad estudiantil y la comunidad en general.
“Los sondeos de audiencia colocan a las radios universitarias siempre en últimos lugares, y los estudiantes de las propias universidades son los que menos escuchan las emisoras” (Romo, 1990. p:33). Por eso que se menciona Radio Universidad como cultura elitista, la que sólo la escucha y la puede entender la comunidad intelectual.
Una propuesta para no caer en la pasividad del alumno, en el desinterés de la gente y para crear interacción con la comunidad en general es aplicar una de las teorías normativas de los medios de comunicación. “Éstas se refieren a ideas acerca del modo en que los medios de comunicación debieran operar o de cómo se espera que operen” (McQuail, 1997. p:165).
La teoría que nos interesa que se lleve a cabo es la democrática-participativa “el punto central de una teoría democrático-participativa reside en las necesidades, intereses y aspiraciones del activo en una sociedad política” (McQuail, 1997 p:164).
La naciente teoría ofrece oportunidades a los receptores de comunicación, ya que uno de sus principios es que todos tenemos derecho a la comunicación, a hacerla y recibirla.
En ciertas comunidades, lugares alejados de la civilización, en las periferias o como se les quiera llamar, se están llevando a cabo medio radiofónicos alternativos, en los que podemos incluir, las radio pirata; radio libre; radio comunitaria; radio alternativa; radio participativa; radio rural; radio cooperativa y muchas más que tienen como principal objetivo la participación ciudadana.
En algunos casos, los media alternativos fueron al mismo tiempo una auténtica alternativa a los alienadores mass-media sometidos al control gubernamental y una forma de comunicación democrática y participativa. En otros casos sirvieron de filtros que descifraran, interpretaban y ayudaban a la gente a resistirse a los mensaje monolíticos de los mass-media. Aún en otros casos, los media alternativos cumplieron un rol político específico en la organización y la educación popular. (Fox, 1988, p.45)



En la radio Universidad podemos incluir conceptos de estas radios alternativas, podemos acercarnos a los alumnos o al sector meta de radio universidad, preguntar qué le interesa escuchar, o qué quiere escuchar, cuáles problemáticas le interesan. Actualmente en Ensenada existe mucha población flotante, o grupos indígenas que se establecieron en algunas tierras podemos crear un vínculo entre la población que siempre ha vivido aquí y la población que llega a quedarse, no tanto crear una utopía de que todos vivieron felices para siempre, sino que, como dice los principios de la teoría democrático-participativa, los medios deben existir para la audiencia, para todo tipo, no sólo para una cultura elitista. Otro principio importante es, el que nos dice que los medios no tienen que quedar sometidos al control burocrático, ya que si Radio Universidad se somete a esta teoría debe ofrece más oportunidades de acceso y participación a la comunidad ensenadense, no sólo a la comunidad estudiantil, sino a otros sectores, que los estudiantes tomen los controles de la radio y que inviten a la gente a participar, creando programas donde haya una interacción y permanezcan cono simples receptores pasivo.
De modo que como estudiantes nos tenemos que hacer escuchar e incitar a llevar a cabo los principios de la teoría democrática-participativa, de lograr una interacción de y con la Radio Universidad para y con la comunidad en general.

lunes, 26 de noviembre de 2007

Alfonso Gumucio

Medios Comunitarios Alfonso Gumucio


From: Maribel Campos Muñuzuri












RADIO UNIVERSIDAD- UABC

La radio en la Universidad Autónoma de Baja California surge a partir de la inquietud de un grupo de universitarios por ver convertida en realidad la posibilidad de contar con una emisora que diera cabida a las expresiones de una comunidad universitaria que requería un medio de difusión de carácter cultural.
Las gestiones para obtener el permiso de operar una emisora de este carácter en la ciudad de Mexicali se iniciaron desde 1974 y fueron encabezadas por las autoridades universitarias en turno, los ingenieros Luis López Moctezuma y Rigoberto Cárdenas Valdés, quienes como rectores de la máxima casa de estudios baja-californiana en su momento, perseveraron ante las autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, para la autorización, la cual finalmente les fue notificada dos años más tarde, para funcionar en la frecuencia 104.1 de FM con una potencia inicial de 250 wats.
Después de muchos ensayos y pruebas, casi accidentalmente logra salir al aire Radio Universidad el 8 de abril de 1976, siendo la Quinta Sinfonía de Beethoven la primera pieza musical en esta emisora, lo cual la convierte en la única radio cultural de la frontera norte de México durante un buen tiempo (Ortiz, 1994).
De ese tiempo a la fecha, Radio Universidad ha transitado por diversos caminos radiofónicos, destaca el inicio bajo la dirección de Antonio Meza Estrada, lapso en el cual se efectuó un trabajo radiofónico sensible a las expresiones culturales de ese momento, y gracias a la participación desinteresada de muchos universitarios, se logró la producción de programas de alto contenido cultural, lo cual fue sustancial para la creación de un perfil propio como emisora universitaria, que hasta la fecha perdura en gran parte de su programación.
Ese trabajo radiofónico ha permanecido durante un buen tiempo en el aire, dado que a pesar de las precarias condiciones de equipo y recursos humanos, se demostró que se podía hacer una radio de buena manufactura. En las siguientes etapas, Radio Universidad ha fortalecido su trabajo, pasando de 250 wats a 100 mil wats de potencia radiada, como opera actualmente, en la misma frecuencia.
Otro hecho importante es el de contar con instalaciones propias y adecuadas, tanto en la planta de transmisiones en el Fraccionamiento Campestre, como en el sótano del edificio de Rectoría, donde se ubican actualmente sus estudios y oficinas.
Asimismo, un acontecimiento significativo para la Universidad Autónoma de Baja California y, en especial, para la radio universitaria, fue la autorización de una segunda frecuencia para el puerto de Ensenada en 1987, la cual actualmente opera en el 95.2 de FM con 250 wats de potencia, la cual próximamente incrementará a partir de contar con un nuevo transmisor y antena.
En ese tránsito radiofónico que señalábamos párrafos arriba, Radio Universidad se ha conducido desde un modelo muy similar a Radio UNAM, con emisiones preferentemente de música clásica, hasta planteamientos radiofónicos más plurales en términos musicales, sin abandonar toralmente los espacios de música formal.
De idéntica manera su perfil de programación se ha adecuado cada vez más a las exigencias del público radioescucha que a la de sus directivos y autoridades en turno, lo anterior a partir de estar más sensible a la retroalimentación de su audiencia cautiva.

Manuel Ortiz Marín Profesor de la Universidad Autónoma de Baja California.

sábado, 24 de noviembre de 2007


Objetivo de la radio comunitaria

Históricamente la filosofía de la radio comunitaria es la de permitir expresarse a los que no tienen voz, de servir de portavoz de los oprimidos (se trate de una opresión racista, sexista o de clase social) y, en general, de ofrecer una herramienta para el desarrollo.

La radio comunitaria es definida a partir de tres aspectos que la caracterizan: se trata de una actividad con fines no lucrativos, la comunidad tiene el control sobre la propiedad y está caracterizada por la participación de la comunidad.

Es necesario que sea claro que el objetivo de la radio comunitaria no es el de hacer algo por la comunidad, es, más bien, el de dar una oportunidad a la comunidad para que haga algo por ella misma, como por ejemplo, poseer el control de su propio medio de comunicación.

"What is Community Radio". AMARC Africa y Panos Africa Austral. 1998